Desde hace un tiempo quería leer Bienvenidos a Occidente de Moshin Hamid y gracias a megustaleeruy tuve la posibilidad de adquirirlo en formato digital y debo admitir que cada segundo de espera valió la pena.
La trama narra la historia de Nadia y Said, dos jóvenes que se conocen en una ciudad donde la guerra civil empieza a tomar las calles, donde mientras las libertades se ven restringidas su amor comienza a florecer y extenderse.
En un ambiente opresivo, surgen rumores de puertas que podrían transportar a las personas de un lugar a otro otorgándoles una deseada libertad.
En la voz de una pareja joven que sirve como sinécdoque de las miles de personas que se ven desarraigadas de su hogar y recorren el mundo con la esperanza de un mañana mejor, el autor nos trae una historia de esperanza y tensión.
Sospecho que la utilización de las puertas (si bien la metáfora es clara) como elemento mágico que permite trasladar de forma inmediata de un lugar a otro, logra un punto de escape a la tensión que genera un ambiente agobiante y denso, logrando puntos de escape que dan a la narración cierto remanso e ilusión al lector.
Si bien vemos el mundo a través de nuestra inexperiente pareja, el autor introduce pequeñas puertas de otras historias, de otros migrantes, que dan un sentido de unidad, no a la historia en sí, sino que ponen a la raza humana en una misma búsqueda.
El autor narra una historia de amor, un amor que nace herido por el humo del ambiente, pero que también respira. Hamid logra hablar de esperanzas y de ocasos con la misma naturalidad que la vivimos y entiendo, que también logra poner al lector en los pies de aquellos eternos errantes que naufragan.
Hamid, a través de una prosa sensible y humana, logra sensibilizar y tocar aquellos temas que muchos vemos de forma lindera inclusive lejana, pero que es vital para el desarrollo del ser, que no es otro que combatir el desarraigo que nos hace sentir la soledad inhóspita de ser humanos, la búsqueda permanente de sentirnos en nuestro lugar, en nuestro casa, en nuestro hogar.